El gobierno del presidente Gustavo Petro ha promulgado un aumento del 12% en el salario mínimo para el año 2024 en Colombia, generando una serie de reacciones encontradas entre sindicatos de trabajadores y gremios empresariales.
Las centrales obreras han acogido con optimismo este incremento, el cual sitúa el salario en 1.300.000 pesos. Consideran que esta medida será un impulso para el crecimiento económico y la recuperación del empleo. Sin embargo, han lanzado críticas hacia los empresarios, alegando que estos no están valorando el esfuerzo de los trabajadores.
El presidente de la CUT, Fabio Arias, ha señalado: “Consideramos positivo el decreto emitido por el gobierno del presidente Petro. Sin embargo, continuamos viendo de manera negativa la postura de los empresarios, quienes parecen no querer reconocer que mejorar los salarios es crucial para reactivar la economía y mejorar las condiciones del país”.
Por otro lado, los gremios empresariales que participaron en la mesa de concertación, como la ANDI, la SAC y Fenalco, han expresado su preocupación ante este aumento del salario mínimo para el 2024.