El expresidente peruano, Alberto Fujimori, abandonó la cárcel en compañía de sus hijos en medio de la controversia generada por su excarcelación, desafiando así las decisiones emitidas por la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH).
El tribunal informó que la liberación de Fujimori, llevada a cabo el 6 de diciembre de 2023 por decisión del Tribunal Constitucional peruano, representa un desacato a las resoluciones de supervisión establecidas por la Corte IDH. Esta entidad, con sede en San José, había solicitado a Perú que pospusiera la excarcelación del exmandatario hasta que se evaluara si cumplía con las condiciones previas de las sentencias dictadas.
A pesar de las dolencias crónicas de Fujimori, como cáncer lingual, fibrilación auricular e hipertensión, el Tribunal Constitucional restituyó un indulto de 2017 «por razones humanitarias». Esta acción se realizó en medio de una serie de vaivenes legales que rodearon el caso del exgobernante, quien había sido condenado en 2009 a 25 años de prisión por crímenes contra la humanidad y permaneció en prisión durante 16 años.
La Corte IDH ha anunciado una supervisión reforzada para garantizar la investigación, el juicio y las sanciones apropiadas en relación con las graves violaciones de derechos humanos en el caso Barrios Altos y La Cantuta contra Perú, específicamente en lo que respecta al indulto otorgado al expresidente.
Los altibajos legales en torno a Fujimori incluyeron la anulación de su indulto en 2019 por la Corte Suprema, seguida de su posterior restitución por el Tribunal Constitucional.